A principios de los años 80, se instauró el sistema que ahora ha terminado abruptamente y que ha dado de comer al pop español durante tres décadas: los municipios celebraban grandes fiestas con actuaciones a menudo gratuitas, designaban a un empresario como organizador y éste adelantaba su dinero para cobrarlo a 30, 50, o 60 días, según el contrato (cuando no según el trato verbal).
Ahora el dinero se ha terminado, se han gastado miles de millones de euros... y apenas se ha invertido en la cultura local o en infraestructuras que perdurasen. "Los concejales contrataban al grupo de moda según los gustos de su hija o de su mujer, y la foto que se hacían en el camerino ha costado millones", dice Santamaría y lo corroboran todos los consultados. El auge del sector inmobiliario explica en buena medida el apogeo del directo de hace 10 años, cuando no era extraño que el mánager facturase una actuación directamente a una constructora. "Y ojalá eso hubiese sucedido más", apostilla uno, "pagaban mejor que los concejales".
ARTE calcula que, en conjunto, entre 2008 y 2011 ha desaparecido el 80% del negocio (y auguran un 2012 devastador)... lo cual no significa que los músicos españoles estén ofreciendo la quinta parte de conciertos que hace cuatro años, ya que ahora actúan con cachés más bajos: en concreto, entre un 30 y un 50% más baratos. "Lo de cobrar 100.000 euros se ha acabado para siempre, ¡aquello no tenía sentido!", dice Iñigo Argomániz, manager de La Oreja de Van Gogh y 19 grupos más. "Lo nuestro iba como un tiro hasta 2009, pero en vez de bajar progresivamente, la caída ha sido muy dura en muy poco tiempo, y ha arrastrado a toda una industria de proveedores".
Empresas de producción, de escenarios, de equipos, de iluminación o de montaje, todas ellas pymes y en algunos casos con proyección internacional, están cerrando en una cadena de dominó propulsada por la morosidad municipal.
Lctr. (C&P)
3 comentarios:
A bailar con las orquestas de to la vida.
Si solo fuera con la musica, lo siguiente es el teatro, exposiciones...
jm
Si, el desastre es total.
Respecto a las orquestas de toda la vida aquí también se gastaban una pasta para que tocaran en las fiestas del pueblo, pero es que los vecinos soltaban la tela sin problema alguno porque en este país, en Essspaña, LA FIESTA ES LO PRIMERO!!!!!
¡¡¡¡COJONES JODER YA!!!!
Rg
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