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Hospitales madrileños usan portadas de La Razón para hacer reír a los niños en preoperatorio 

La técnica ya se empleaba con éxito en pacientes adultos 

 

Mostrar la última portada de La Razón a un niño que está a punto de entrar en el quirófano, o que lleva varios meses ingresado por convalecencia, no solo mejora su estado de ánimo al provocarle sonoras carcajadas sino que fortalece sus defensas en general y le proporciona una visión realista, y cómica al mismo tiempo, sobre la España del Partido Popular.

La técnica, sugerida por el servicio de psicología del Hospital Carlos III, está teniendo un notable éxito en la práctica totalidad de los pacientes, aunque solo funciona debidamente con el setenta y cinco por ciento de las portadas, ya que algunas de ellas no solo hacen que el chaval se parta de la risa sino que a continuación se indigna y pide el alta voluntaria para salir a la calle a quemar redacciones de sinvergüenzas. “Nos pasó ayer con la primera plana que denunciaba las supuestas vacaciones de lujo de Manuela Carmena”, señala uno de los cirujanos del Carlos III. “Le enseñamos el diario y se empezó a descojonar, pero enseguida se fabricó un coctel Molotov con el gotero”, añade el doctor.

A pesar de todo, el novedoso método se muestra seguro en la mayoría de los casos e incluso se está barajando la posibilidad de enseñar a los niños con poco sentido del humor el interior del diario y, sobre todo, la editorial de Paco Marhuenda.

Rokambol & Lctr.