El pecado

La España profunda no es alguna cosa que existe dentro de nuestro país independientemente del resto del conjunto.

No.

España entera es profunda.

No hay más que viajar por sus diferentes regiones, entrar en sus bares, convivir en sus fiestas, para constatar que las diferencias que en principio pueden existir entre un payés y un pasiego, entre un extremeño y un vasco, entre un andaluz y un gallego.., son extremadamente superficiales. 

Cuando se obvia la aparente diferencia, y se profundiza un poco más, nos encontramos con la miseria que a todos nos une y nos hace iguales.

El miedo.

España entera, en lo profundo, está cagada de miedo. 

Han sido siglos de intenso dominio absolutista y descerebrado, de la mano siempre de una terrible y perversa versión de la religión católica. El abominable catolicismo español ha impregnado todos los territorios de nuestro país, y ha sido causa principal de todas nuestras desgracias.

Hemos sido educados en el dogma, el terror, y la creencia ciega. Valores que han permitido campar a sus anchas a unos pocos privilegiados en detrimento de la mayoría de la población.

No existen armas de destrucción masiva más potentes y terribles que el miedo y la creencia ciega. No hay nada tan brutal y efectivo para dominar las mentes castigadas de la población. Son armas certeras, positivas, y definitivas.

La educación religiosa nos ha introducido desde niños en nuestros cerebros la culpa, la maldad, el vicio, la flaqueza.., Nos ha incrustado en lo más profundo de nuestra mente el pecado.

Una sociedad cuya educación está basada en el pecado, es una sociedad perversa, maligna, insolidaria, vacía, manipulable...

Es una sociedad que es capaz de eliminar, sin miramiento alguno, aquello que viene en su ayuda, en su mejora y evolución, en su ilustración...

Es una sociedad viciada por el odio que rechaza sin reservas el pensamiento crítico, y no dudaría ni un segundo en suprimir cualquier movimiento de cambio o de mínima variabilidad.

Es una sociedad, que por contra, abraza la incongruencia, la barbarie, la sinrazón, la incoherencia, y el brutalismo...

Sin ninguna otra razón que la "mala leche", la "mala hostia", y el "que se jodan.."

Como fanáticos.., 

Como idiotas.

Lectr.

PS. (Después de explicado esto, ahora ya podéis analizar los resultados electorales de una manera más objetiva)