No puedo

No puedo.

Me quise ir pero no puedo..,

porque alguien tiene que quedar para explicar de alguna manera lo que pasa...

porque alguien tiene que quedar para desahogarse...

porque nuestro país no puede ser.

Y no puede ser que nuestro órgano máximo del poder judicial, la voz última que decide sobre nuestro comportamiento en España, ese mismo tribunal que ratificó hace unos meses que nos tenían que devolver los abusos perpetrados por la banca en nuestras hipotecas.., y que al día siguiente se desdijo de todo lo dicho.., sí.., ese supremo tribunal.., ese órgano supremo y máximo de nuestra judicatura...

Nos digan hoy que no se puede, de momento, sacar a un genocida asesino que contribuyó junto con la iglesia católica a devolvernos al medievo, y a retrasar nuestro desarrrollo cuarenta años con respecto al resto del mundo civilizado.

No se puede aguantar que esos mismos miembros de ese alto  y Supremo tribunal reconozcan que "hay que llevar cuidao, porque Francisco Franco era el jefe del estado español desde el 1 de octubre del 36".

Sí.., habéis oído bien, esa ristra de personajes arrastrados, lameculillos, grandes comedores y bebedores, que rodean al hijo y nieto de reyes absolutistas en la foto, esos elementos elegidos democráticamente a dedo desde hace otros cuarenta años, deciden que un general golpista, genocida, que a perpetrado crímenes contra la humanidad en número de 150.000 personas (que se sepan) es nuestro jefe del estado desde aquel primero de Octubre.

Al mismo tiempo la fiscalía de nuestra querida España nos indica que los separatistas catalanes, en esa misma fecha del primero de Octubre, han cometido delito de rebelión equiparable a Golpe de Estado, por haber puesto unas urnas en la calle.

¿Estamos locos..?

¿Hay alguien ahí..?

Sí.., siempre hay alguien ahí...

Y ese alguien no son más que el presentador de moda, Pablito Motos, hombre venido a más desde aquel barrio de Requena, y el gran Revilla, gran populista santanderino que nos quiere hacer creer que es como todos nosotros, y todavía menos que nosotros. Un simpático labriego licenciado en económicas, en el franquismo, cuando España entera andaba en zapatillas.., pero muy cercano y pueblerino. Uno de los nuestros.

Entre ambos explican al vulgo que hay que respetar siempre las decisiones del Tribunal Supremo, porque lo que dice el Tribunal Supremo es la ley..,

y la ley va a misa...

Se les llena la boca de decir que los políticos catalanes han de acatar la ley de ese Tribunal. Pero no dicen nada de la misma ley, emanada por ese mismo tribunal, que nos daba la razón a los hipotecados, y que se cambió al día siguiente por el artículo 33, es decir, por sus cojones.

Para rematar, el uno y el otro compadrean y acuerdan que personajes como Amancio Ortega no pueden ser de ningún modo cuestionados... Para ellos, elementos como el dueño de Inditex, son los que hacen falta en nuestro país, y no mierdas como los de Podemos que han cuestionado su fortuna desmesurada y su comportamiento pseudocaritativo.

No puedo..., queridos amigos..

Nos cultivan..

Lctr.