Casos aislados

"Shon cashosh aishladosh.." Dice con perfecta pronunciación nuestro presidente del gobierno cuando habla de la corrupción de su partido. Este lunes han sido citados a declarar todos los miembros del grupo del PP en el Ayuntamiento de Valencia, así como sus asesores, cerca de 50 personas. La mayoría de ellos provienen de la etapa de Rita Barberá, líder en la sombra y la única que no está investigada, pero sí muy señalada, al ser senadora y estar aforada.

Con estos datos parece quedar demostrado que lo único que es aislado dentro del partido popular es la decencia. 

Tanto le importa España a Mariano y a los suyos que han decidido quedarse parados a la hora de formar gobierno, a sabiendas de que sólo les vale una amplia mayoría para amparar y seguir disimulando el enorme vertedero de robos de su partido. Por eso no han hablado con nadie. Nada les vale. Son capaces de someter al país, con la que está cayendo, a un nuevo y costoso proceso de elecciones pensando que a la segunda va la vencida. Y a la segunda tampoco va a ser, Mariano. Mucho me temo que tarde o temprano vais a ir desfilando todos, tú incluido, por los juzgados y no podréis dirigir ni colocar a los jueces como habéis hecho hasta ahora.

Pero claro, para que esto se consiga necesitamos del otro partido habitual del gobierno, el partido socialista, los amigos de los niños...

"Un gobierno de coalición con Podemos no lo veo. No lo veo. No es el gobierno socialista, con ese proyecto progresista, reformista que se ha hablado aquí, con esos ocho pactos que apoyo del secretario general, que necesita nuestro país" dijo ayer sin rubor Susana Díaz, presidenta de Andalucía y símbolo de los cuarenta años de estancamiento de una región gracias a los sucesivos gobiernos socialistas. Que no dudó lo más mínimo en pactar con C's antes de con la opción realmente progresista representada por Podemos. A ella, como a Rajoy, tampoco le valía, necesitaba un "gobierno fuerte" para poder seguir cobijándose, y escondiéndose, recalificando, y adjudicando.

Es tal el afán por los presupuestos de estos llamados socialistas que todos sus viejos dinosaurios no verían del todo mal un pacto con el PP para salvar los muebles de todos.

Con este panorama se podrían hacer un par de cosas. La primera de ellas es seguir como estamos, sin gobierno y tan agusto (creo que sería la mejor opción) La segunda es permitir que Pedro Sánchez pacte con podemos y dé una vueltecita de refresco al partido (esto no se lo van a consentir)

Sea como fuere, la única opción que tenemos los ciudadanos es no permitir nunca más este tipo de políticas, y seguir por la vía que ya se ha comenzado.

Lctr.