PWC, KPMG, ERNST & YOUNG, Y DELOITTE
Son las grandes empresas evasoras de impuestos a escala mundial, las 'big four', y estan a sueldo de las también grandes multinacionales. Un conjunto de causas penales, registros gubernamentales y archivos secretos descubiertos en una investigación del International Consortium of Investigative Journalists (Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, ICIJ), en la que ha tomado parte El Confidencial, revela que las big four son los grandes arquitectos del sistema de paraísos fiscales y jugadores centrales en el diseño de una gama de transacciones transfronterizas para evitar el pago de impuestos que pueden plantear cuestiones legales y éticas.
En Luxemburgo, los documentos internos de las empresas que ha descubierto el ICIJ demuestran que PwC ha ayudado a Pepsi, Ikea y otros gigantes empresariales de todo el mundo a diseñar estrategias para trasladar beneficios que les han permitido recortar drásticamente sus facturas fiscales en miles de millones de euros.
"Se supone que estas firmas se fundamentan en el honor y la integridad y que son vigilantes del mercado, pero se han hecho tan grandes que no les importa nada más que ganar dinero", argumenta Francine McKenna, una exprofesional de PwC y KPMG que ahora escribe el blog re:The Auditors sobre las malas prácticas de estas consultoras. "No les preocupa su reputación, porque todos estos casos no han afectado a su capacidad de crecer más y más y más".
Y cuando se meten en problemas, las big four suelen echarle la culpa a empleados individuales que actuaron por su cuenta, dicen que sus gestiones no han sido interpretadas correctamente o que se han sacado de contexto.
Las batallas legales de la última década han planteado la cuestión de si los Gobiernos consideran a estas firmas, como a los mayores bancos, "demasiado grandes para caer". Esta política no escrita, según los activistas anticorrupción, ha impedido una verdadera reforma de estas firmas porque saben que las autoridades no van a ir más lejos a la hora de castigar sus malas prácticas.
Como es sabido, Economía ha impuesto una multa de 12,3 millones a Deloitte por conflicto de intereses en Bankia (era su auditor y a la vez diseñó su salida a bolsa). Y ahora el Gobierno está decidido a aprobar una Ley de Auditoría que endurecerá radicalmente las incompatibilidades, hasta llegar incluso a la "facturación cero", es decir, a la prohibición de que el auditor de una empresa le facture un solo euro por otros servicios.
Curiosamente las auditoras han sido incapaces de detectar ninguno de los grandes escándalos contables que han costado miles de millones a los inversores y al erario público en los últimos años: CCM, CAM, Bankia, Pescanova, Gowex, etc.
No obstante, la influencia de las cuatro es tal que algunas incluso ‘ayudan’ a los Gobiernos a redactar las leyes para prevenir la evasión fiscal… para que sigan permitiendo sus actividades. "Es otra puerta giratoria. Es como si los guardias forestales estuvieran comprados por los cazadores furtivos". Sin ir más lejos, el actual secretario de Estado de Hacienda español, Miguel Ferre, era socio de PwC hasta 2011. Fuera del ámbito fiscal, el propio Luis de Guindos y Antonio Carrascosa (director general del FROB) trabajaban también en la firma antes de incorporarse al Gobierno.
Lctr. (C&P)
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