Con 47 millones de habitantes y 17 autonomías divididas en 50 provincias, sin contar Ceuta y Melilla, España tiene a su disposición 52 aeropuertos, de los que solo ocho son oficialmente rentables; más de una veintena de provincias dispone de otro aeropuerto a menos de una hora por carretera. Alemania, con casi el doble de población que la española (81 millones de habitantes), no necesita más de 39 aeropuertos.
Alemania solo necesita 10 canales televisivos autonómicos, mientras que en España existen trece operadores públicos de titularidad autonómica que emiten en 26 canales. Solo la televisión valenciana acumula una deuda de unos 1.200 millones de euros, la mayor de todas las autonómicas. Sin subvenciones de las autonomías ni tasas, entre todas arrastran una deuda de más de 2.100 millones de euros.
España es el país europeo con mayor número de políticos (445.568) con cargos públicos por habitante de toda Europa. Unos trabajadores que se dedican a la función pública, 300.000 más que en Alemania, que copan todos los niveles de la administración (senadores, alcaldes, diputados, concejales, organismos internacionales, consorcios, mancomunidades…).
España es el segundo país del mundo en longitud de líneas de alta velocidad, solo superado por China (con una población treinta veces mayor), y con muchos más kilómetros que Francia y Alemania. Un ejemplo: en 2010, España contaba con 3.744 kilómetros de AVE; en Alemania, apenas superaban los 1.400 kilómetros. En julio de 2011, Fomento cerró la línea directa Toledo-Cuenca-Albacete, en la cual perdían 18.000 euros al día por transportar una media de nueve pasajeros diarios. Ninguna línea en España, ni siquiera la de Madrid-Barcelona, es rentable.
Lctr (C&P)
1 comentario:
Somos los mejores OE OE OEEE
Que desastre, madre.
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