Veamos esta noticia dada hoy mismo en el telediario de Telemadrid (los subtítulos los he puesto yo, aunque se entienden perfectamente)
Y ahora un pequeño análisis.
Lo primero, ¿alguien sabe porqué se manifestaba la peña allí?
- La primera parte de la noticia se preocupa de dejar claro los modales y educación de los sindicatos.
- Luego unos segundos dedicados a solidarizarse con la víctima, el consejero Wemes (escribámoslo así)
- Seguidamente se resalta los problemas de los profesionales de la información para realizar su trabajo, por culpa de los manifestantes (esos malditos).
- Todo se adorna con unas democráticas palabras de Wemes.
Bueno, la realidad es que los sindicatos, pero sobre todo los trabajadores (estén o no afiliados), protestan por el proceso de privatización que sufre la sanidad pública.
- Lo que no dicen es cuánta gente se está yendo y se va a ir al paro como consecuencia de este proceso.
-Tampoco hablan de la orden que han dado de prohibir a los hospitales cualquier contrato eventual nuevo o renovado.
- Tampoco que paralizan la contratación pública (oposiciones).
-Tampoco la discriminación salarial del personal no sanitario (administrtivos, celadores, lavandería, cocina, etc) frente al personal sanitario (médicos, ATS, fisio, odontólogos, etc)
Simplemente los sindicatos son unos vándalos maleducados, una aberración, una malformación del sistema, una vergüenza para esta sociedad.
¿Estamos?
Carlos
5 comentarios:
Lo de Telemadrid es un insulto constante a la inteligencia del espectador. Sólo hay que ver el informativo de la noche para darte cuenta de que esta gente no tiene el más mínimo pudor. El problema ya no es que manipulen descaradamente las noticias. La cosa es que se está utilizando una tele para lanzar consignas políticas, los periodistas se han convertido en políticos que utilizan su medio para adoctrinar a la plebe sobre la política neoliberal y en concreto sobre la figura de esperanza aguirre (cólera de dios) esa grandísima zorra de la que tantas cosas nos quedan por ver.
Responderá el hombre de derechas a este comentario que todos han manipulado cuando han estado en el poder, y es cierto, pero el problema es que estos lo hacen siguiendo a pies juntillas el manual que escribió goebbels, el ministro de propaganda nazi, ya sabéis, aquello de que una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. Algo a lo que también se han apuntado desde hace tiempo nuestros queridos Casimiro García Abadillo, melchor miralles y pedro j, los protohombres y mentes preclaras que han pensado que por repetir hasta la saciedad que zapatero organizó lo del 11s la gente se lo iba a creer... y ¡sorpresa! mogollón de gente se lo ha creído. Y además han vendido mogollón de periódicos (que al fin y al cabo es de lo que se trata)
Es el nuevo periodismo. A esto hay que añadir a césar vidal y pio moa, que no paran de sacar libros de historia en los que se reinterpreta sistematicamente todo lo que les molesta.
¡Viva Urdazi! padre espiritual de todas las cosas
jm
Xactamente.
De hecho en la noticia, no lo he mencionado, pero también meten una cuñita contra ZP y sus muchachetes.
Definitivmente el periodismo como información se ha mezclado demasiado con la opinión política, más por la derecha que por la izquierda, pero por ambos lados al fin y al cabo, y eso hace que se convierta en propaganda, y asi llegamos a Goebbels.
Lo triste es que deben tener comprobado que esa táctica da resultados y la utilizarán mientras les funcione.
Y ya que citas a Urdazi qué mejor ejemplo de lo poco que importan el honor y la vergüenza: si hay que manipular se manipula, si hay que hacer monólogos de humor se hacen y si hay que mirar quién baila pues también. ¿Qué pudor se puede esperar de esta gente?
Traigamos aquí de nuevo la caballerosidad y buena liz con la que se baten ejemplarmente M.Ángel Rodriguez y Maria Antonia Iglesias.
Al final, en contra de lo que dice Sánchez Ferlosio, no nos quedará en la tele y en la prensa nada mejor que el deporte.
Carlos.
O quizá el deporte es la anestesia necesaria
jm
Siempre nos quedara a lo usuarios el poder criticar constructivamente las cosas, lo que en algún tiempo en España fue un riesgo clandestino.
Eso como mal menor.
Publicar un comentario