viernes, 28 de octubre de 2016

El Hombre de los Cuatro Millones de Dólares


Todos pudimos ver ayer como ante la imposibilidad de rebatir con argumentos sostenibles las acusaciones de Pablo Iglesias sobre la delincuencia potencial de las señorías populares, el perro guardián del régimen, Rafael Hernando, el hombre de los cuatro millones de dólares, volvió a soltar espuma por la boca en forma de Venezuela sin tener en cuenta el archivo judicial de la causa, que hasta por cuatro veces ha sido tumbada en los tribunales.

Una vez más la mentira y la falsedad de argumentos "populistas" son utilizados en contra de un partido, con el beneplácito y la colaboración de la presidenta del Congreso, que nada hizo por restablecer la calumnia. 

Una vez más todos los medios de comunicación señalan a Pablo Iglesias como persona que adolece de modos, maneras, y ética política, simplemente por decir la verdad en la cara en el lugar donde hay que decirla.

A todos nos puede parecer Pablo Iglesias mejor o peor, no siempre está acertado, a veces se deja llevar por el ímpetu y el ardor del momento levantando puños y elevando consignas que en nada favorecen su discurso, pero ayer no hizo nada de esto. Sólo dijo la verdad. Verdad avalada ampliamente por jueces y tribunales. Es más, desde que este chico y otros como él pasean por el hemiciclo, las sesiones parlamentarias son más vivas y el congreso se ha renovado y fortalecido, después de años dormido en un "turnismo" y una indolencia desesperante.

Quizás en España se entienda la ética política como la sustracción del dinero de todos para beneficio de sedes de partidos, empresarios amigos, sobresueldos en sobre, cacerías con el dinero preferente de jubilados, tarjetas opacas... quizás esos sean los modos y las maneras elegantes que les gustan a sus señorías populares incluyendo al presidente de su partido.

Va siendo hora de que todo este hatajo de sinvergüenzas propiamente dichos, entre los que se encuentra la señora de Cospedal, marquesa del finiquito en diferido, que ayer musitaba en voz baja lo que no puede decir en voz alta no vaya a ser que sus palabras se revuelvan contra ella... Va siendo hora, señorías, de recoger el chiringuito de una vez por todas.

Esperemos que para cuando esto ocurra todavía quede algo con lo que restablecer el país.

Lctr.

miércoles, 19 de octubre de 2016

Bob Dylan


Vicenç Navarro
Catedrático de Ciencias Políticas y Políticas Públicas. Universidad Pompeu Fabra
Diario Público

No me agrada ser un aguafiestas, pero en el momento en el que muchos celebran el otorgamiento del Premio Nobel de Literatura a Bob Dylan, quisiera hacer algunas aclaraciones sobre su evolución, corrigiendo así una idealización de su figura que tiende a ser una práctica generalizada en los grandes medios de información españoles. De ahí que me permita publicar de nuevo un artículo ligeramente modificado que ya se publico en El Plural el 03.03.14 y que publico de nuevo ahora en Público.

A lo largo de mi vida he visto en múltiples ocasiones la evolución que siguen muchos personajes que, siendo en su juventud críticos con las estructuras del poder en los países que viven, se acomodan más tarde a estas estructuras, convirtiéndose en sus portavoces. En realidad, esta evolución es muy común. Es tan común que un dicho que se repite con gran frecuencia (sobre todo por voces conservadoras) es que “la persona que no ha sido radical contestatario en su juventud es que no tiene corazón. Pero la que continúa siéndolo más tarde, es que no tiene cabeza”. Ello ocurre en todas las áreas de actividad humana, incluso entre los músicos. Un ejemplo de esto es Bob Dylan.

Bob Dylan, en su juventud, fue uno de los cantantes más críticos con el establishment estadounidense. Fue, junto con Joan Baez, la voz del movimiento estudiantil anti Guerra del Vietnam. Representaba la cultura pacifista y antisistema, muy generalizada en los campus universitarios de los años sesenta. Era un movimiento iniciado por los estudiantes de las universidades, que en su gran mayoría procedían de las familias con más recursos en EEUU. Era, como la definió Bruce Springsteen, una cultura de privilegio, que se oponía y rebelaba frente al establishment que dominaban sus padres.

Springsteen, por el contrario, representaba un movimiento anti sistema de origen de clase trabajadora, que cuestionaba y criticaba el narcisismo y hedonismo presentes entre los “flower children” de Berkeley y otros centros académicos. El conflicto entre las dos culturas era una especie de lucha de clases dentro del movimiento anti establishment, tal como detallé en otro artículo “Lo que no se dijo en España sobre Springsteen”, Público (28 de junio 2013). Estados Unidos, en contra de lo que se dice y escribe en España, es un país donde la categoría de clase social es determinante para entender aquel país. Y ello en la gran mayoría de los componentes de aquella sociedad, que van desde la música hasta el deporte. Así, los dos grandes deportes en EEUU son el baseball (de origen predominantemente de clase trabajadora) y el “futbol americano”, que no es el futbol europeo sino una especie de rugby (de origen de clase media alta, que se inició en los campus universitarios).

La final de la liga del futbol americano fue el pasado 2 de febrero, en la Super Bowl, cuando millones de estadounidenses se pasan casi todo el día frente a la televisión. Es uno de los días en que cuesta más dinero poner un anuncio en la televisión, debido al elevado número de televidentes. Pues bien, el anuncio que creó más sorpresa y más enojo entre las fuerzas progresistas de EEUU fue un anuncio de la empresa productora de coches Chrysler en el que, con un chauvinismo ofensivo para muchos otros países, se indicaba que para ciertos productos de consumo, importantes pero no esenciales, los americanos pueden depender de productos extranjeros (la cerveza hecha en Alemania, los relojes hechos en Suiza, o los móviles que se producen en Asia). Pero para productos esenciales, es decir, para los automóviles, los mejores productos son los americanos, apareciendo entonces la última versión de los coches Chrysler. Y el que hacía el anuncio era ni más ni menos que el mismísimo Bob Dylan.

El anuncio creó gran revuelo e interés (que era lo que Chrysler intentaba), pero enojó a muchísimos estadounidenses que están cada vez más hartos del chauvinismo americano. Señalaron –entre otros hechos- que 1) Chrysler no es una empresa americana, sino italiana. Es propiedad de FIAT (antes lo había sido de Mercedes-Benz); 2) que el pueblo alemán hace muchas más cosas que la cerveza, incluyendo automóviles más eficientes y de mayor calidad que empresas estadounidenses; 3) que los pueblos asiáticos están hoy entre los más avanzados en áreas tecnológicas, y así un largo etcétera. Y, por cierto, que el término americano que se utiliza constantemente en el lenguaje cotidiano incluye a la mayoría de americanos (que viven en el sur y centro en lugar del norte de las Américas).

Bob Dylan, que había sido una de las voces de los años sesenta que denunciaba el chauvinismo del establishment americano, se había convertido, años más tarde, en su promotor y portavoz. Y a esta evolución, los conservadores la definen como “madurez y utilizar la cabeza”, cuando lo que quieren decir es “abandonar los principios para poder ganar dinero sin ningún tipo de escrúpulos”. A esto le llaman madurez. Mientras, el nivel de popularidad y respeto por Bob Dylan ha disminuido notablemente en Estados Unidos.

Termino aquí lo que dije en marzo de 2014. Me parece bien que se celebre al Bob Dylan de su juventud, a pesar de las limitaciones que tenían sus canciones, resultado de un contexto político distinto, por ejemplo, al de Bruce Springsteen. Pero lamento que facetas más tardías de su vida no aparezcan en sus notas biográficas. Es importante que la historia, incluida la literaria y la musical, se presente tal como fue, y no como desearía que hubiera sido el que la escribe.

Lctr. (C&P)

PS. Gracias Vicent por tener la "cabeza perdida" a tus 78'. Claro síntoma de "Libertario residente.." Y recuerda que al otro del que hablas, Bruce Springsteen, también hay que darle lo suyo...

viernes, 14 de octubre de 2016

El Tonto era Él


Este señor amigo de las coplas y de la fiesta nacional, fumador de puros de uña larga y admirador de tronos y paseillos. Este viejoven con aroma a rodal de sobaquillo y a sol y sombra de Soberano, no para de insultar a todos los que no le bailan el agua al partido del gobierno y a la iglesia que le paga. Sí, la iglesia que pagamos todos por obligación aunque no queramos, es quien mantiene a este y a otros "fenómenos de masas".

Este defensor de la España cañí y de la España ignorante que le ríe las gracias mientras se enciende los puros con su dinero, no para de llamar tonto a todo aquel que se salga de los valores rojigualdas y legionarios de los que hace gala cada día en su nauseabundo programa.

Se le llena la boca de insultos a los que no fueron a "la gran cita" de su rancia hispanidad pero no los nombra, no se atreve, porque es un bocas cobardón que pierde la fuerza por el pico, ya que cuando los tiene delante carece de argumentación en su discurso, y el que queda verdaderamente como un tonto siempre es él y toda su cohorte de zombies tardofranquistas.

Tarde o temprano desapareceréis, vuestra presencia es anacrónica y absurda. Si no fuera así mucho me temo que el país no tendría ya ningún remedio.

Lctr.















miércoles, 12 de octubre de 2016

Everybody's Changing


Son pequeños detalles casi imperceptibles, pequeños giros, pequeñas alteraciones del patrón habitual que nos muestran el camino hacia un lugar diferente.

Son señales de esperanza.

Hoy, entre sonidos de corneta pretéritos y olor a Farias y a colonia de "Álvarez Gómez", se ha celebrado esta rancia fiesta de exaltación de una bandera y de un himno que no representan a casi nadie en un país que está pidiendo a gritos una evolución. Para empezar hoy el sol no ha acompañado como suele hacerlo en estos días tan señalados, en su lugar una fina lluvia ha caído como un manto de salvación para alivio de tropas, soldados, caballos, y cabras, y ha mojado sin piedad a reyes, prelados, ministros, y autoridades. Por primera vez políticos elegidos por el pueblo con amplias mayorías no han acudido a la cita, una decisión que les honra, porque con esta "Hispanidad" que se celebra cada año son muchos los que no se sienten identificados. 

Es poco, es pequeño, pero antes no había nada.



Lctr.

martes, 4 de octubre de 2016

Minutos musicales

Ya que este videoclip lo han visto más de 800 millones de veces, que sea una más. Temazo.



Rg