domingo, 3 de agosto de 2008

Conil

La primera vez que llegamos a Conil en los ochenta, en una Nissan Vanette, nos quedamos embarrancados en la playa, y pasamos la noche en ella acompañados de dos botellitas de JB.

Al amanecer pudimos ver una imagen como esta...



Esta imagen es de los años 60. Es una foto de "Juan Capacha", personaje americano que recaló en Conil en aquellos años, y allí se quedó.

Como Capacha, todos los que vamos recalando en Conil nos vamos quedando. No sabemos a que es debido, pero seguro que tiene algo que ver con la naturaleza, algo que ver con el agua, la sal, el viento y... la Luz.



Luz que inspiró a Sorolla y le hizo pintar esos niños en el atardecer playero, esos niños asorollados en los que todos nos convertimos al pisar esas playas.



Luz que hace que los hotentotes y los ballenatos se transformen en niños...



Allá donde los cetáceos...



...quedan varados.



Ese Conil, Ese Cai...



Esta España querida...

Lectr.

2 comentarios:

Unknown dijo...

la forma es el vacio, el vacio es forma.
no hay habitación vacia si la mente está llena.
sin dientes
sin ojos
sin oidos
sin dientes
sin tacto
sin color
sin olor
sin muerte
sin miedo

kakos

Anónimo dijo...

Xactamente...