miércoles, 4 de abril de 2012

EL IDIOTA

Ante la inminencia con que su país va a necesitar más trabajadores, Merkel ha dicho que estando el 40 por ciento de los jóvenes españoles en paro Alemania no traerá inmigrantes de fuera de la UE. Es un razonamiento correcto, impecable. El único problema, para Merkel y para España, es que  la mayoría de los jóvenes españoles que se encuentran en el paro ni trabajan ni quieren trabajar, y pese a tener gratis el acceso a la universidad no han estudiado nada, ni saben nada más allá de liar porros, atacar a la policía y vivir del cuento y de sus padres. Estoy convencido de que algunos de ellos no saben ni dónde está Alemania.
Precisamente por ello están en el paro. Porque en el colegio se dedicaron a faltarle el respeto al profesor las pocas veces que acudieron a clase, porque los que llegaron a la universidad se pasaron el día en el bar y los que no llegaron pensaron que era rebajarse aprender un oficio. No hablo de todos, sé que hay excepciones. Pero buena parte de los jóvenes españoles que están en el paro, si realmente quisieran trabajar, trabajarían, incluso sin ser preciso que se marcharan donde la tía Ángela.
De momento les sale más a cuenta espachurrarse en el sofá y pasarse el día quejándose por todo. Les conozco muy bien. Sé quiénes son, sé dónde están. Les vi en los alborotos de Barcelona, cortando calles, agrediendo a los que querían ir a trabajar y reventando cristales. Les vi insultando y atacando a la policía. Les vi quemando contenedores, les vi la semana pasada, el mes pasado, el año pasado, aprovechando cualquier excusa para armar follón y escándalo. Les vi ocupando ilegalmente Sol y la plaza Cataluña, les vi incendiando la ciudad y ocupando las universidades en sus manifestaciones contra el Plan Bolonia. Les vi en aquello de la antiglobalización, asaltando El Corte Inglés.
Les he visto haciendo tantas cosas y tan demenciales que no las puedo recordar. Les he visto haciendo todas las cosas menos una: trabajar. Es muy de agradecer lo que propone Merkel, y muy interesante, pero me cuesta creer que si estos chicos, de 20, 25 y hasta 30 años no han dado un palo al agua en sus respectivas ciudades vayan ahora a desplazarse a Alemania -una vez descubran dónde está- para someterse a los rigores de un mercado laboral como Dios manda y no este permanente carnaval de la baja fraudulenta y el día personal que impera en España. 
No faltan puestos de trabajo. Falta tensión, faltan ganas de trabajar, falta un sentido moral de la existencia, una ética superior a las leyes que escriben los hombres. Tendría gracia que vinieran los alemanes a reclutar jóvenes españoles parados: me gustaría ver la cara de tanto quejica puesto al fin entre la espada y la pared, me gustaría escuchar sus excusas, sus intentos por zafarse una vez más de su deber.
Merkel tiene suficiente mala leche para hacerlo, pero nuestros jóvenes mucha más jeta de la imaginable no sólo para no aceptar su oferta sino para encima insultarla. Le llamarían nazi y negrera. Y sólo por ofrecerles un puesto de trabajo.





Lctr. (C&P)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Quiero ver a Alex y los drugos cruzandose con este tipo en un callejón de la ciudad. Que uno de ellos diga " un momento, pero este no es el idiota?". Daría dinero por sentir el escalofrío que recorrería su espina dorsal. Daría dinero por que alguien me dejara una silla plegable para sentarme a ver el espectáculo. Por que se escuchara algo de wagner en ess momento. Daria dinero porque durante la paliza alguien leyera en voz alta el articulo. En fin, pagaria lo que fuera por ese espectaculo. Aunque creo que eso no tiene precio
Jm

deivit dijo...

Parece un evangelista con sus frases.
A por el...

otra vez deivit dijo...

Buena la cabecera mu de semana Santa, si Señor.
A por las torrijas.

Judá LEC-TER dijo...

Un día aparecerá este idiota, apaleado como el hermann tertsch, después de intentar abusar de una menor, y culpará de ello a Zapatero.

Nos toca remar como a Heston...

Anónimo dijo...

A galeras a remar... Muy buena!!
Jm