lunes, 21 de diciembre de 2015

Las "caritas" de la rescaca electoral

Conociendo a España y los españoles, muy felices se las prometían estos sospechosos ciudadanos ejemplo y modelo de un capitalismo vetusto que quería pasar por "renovado". Con unas ansias desmedidas por pillar cacho, con una ambición y soberbia enormes, con toda la maquinaria del estado a su favor, con todos los medios de comunicación entregados, con el respaldo del Ibex 35, con todo ello, no han podido engañar a la mayoría del electorado que les vió el plumero desde las primeras de cambio.

Nada tenemos que decir tampoco de esto otro


Estos señores, herederos directos de la España franquista, con sus seguidores acérrimos como novios de la muerte, imperturbables ante los cuatro años de saqueo, corrupción, intervención de los medios de comunicación nacionales, privatizaciones, y recortes sociales, que no han dudado en volverles a votar como si les fuera en ello la vida, con todo ello, tampoco han cumplido sus expectativas.

Y estos..


Estos líderes de la izquierda descafeinada, continuadores de un felipismo recalcitrante cuyo mayor enemigo se encuentra entre sus propias filas, completamente descolocados en el panorama político, que no han sabido entender los cambios sociales promovidos por el 15M, y que lejos de incorporarse a esa línea lo que han hecho es enfrentarse a ella, enfrentándose también a una Cataluña que podría haber sido su mayor aliado, estos, han conseguido su peor resultado en la historia de la democracia.

Y ahora me diréis que cuál es el panorama que nos queda. Qué se puede hacer. 

Pues muy sencillo.

Lo mejor que se puede hacer, la mejor opción de todas, es dejar que el PP forme gobierno en minoría con el falangito. Un gobierno en minoría no les va a permitir meter mano de la forma tan descarada como la han metido en todos estos años. Además un gobierno así pondrá en evidencia, y nos dejará ver definitivamente el plumero de los muchachos de Ciudadanos. De esta forma en un plazo de apróximadamente un año tendremos de nuevo elecciones.

Y esa vez será la definitiva.

Lctr.

No hay comentarios: