viernes, 26 de junio de 2009

I Want You Back

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Los negros en América siempre fueron ciudadanos de segunda, trabajadores, esclavos.

El talento musical de los negros era utilizado, como su fuerza, pero nunca fue reconocido.

Los blancos usaban el talento negro y así surgieron fenómenos como Elvis. Todos los musicales de Broadway, interpretados por blancos, eran puro talento negro.

Talento negro que pasaba por talento blanco.

Pero un día nació un niño.

Negro.

Y ese pequeño niño negro no pudo ser escondido.

No se puede esconder la fuerza de lo natural.

Porque esa fuerza es superior a todos los hombres y bestias.

Esa es la fuerza incontenible, que nos hace bailar.




Adios Michael.



Lctr.

2 comentarios:

deivit dijo...

De siempre, el tal Michael Jackson
, me ha parecido un personaje anacrónico, fuera de sitio , fuera de cacho, quizá su sitio estaría en Alejandría, en Tebas o en la misma Roma.
Pues eso, que me parecía un poco Cleopatra.
Y no reniego de su música, que me gusta y es banda sonora de mi vida.
D.E.P.

Anónimo dijo...

Musicalmente nunca me pareció nada del otro mundo. Un exitoso cantante pop al que le reconozco sus buenas canciones, como muchas otras de otras gentes. Quizás me falte oir mucho de su obra, lo reconozco, por eso quiero ser prudente cuando digo esto.

Eso en lo musical.

Como personaje público nunca entenderé porqué se cambió la tocha, el pelo, el color de la piel... No estaba bien de la cabeza, no le veo otra explicación. Por lo tanto, lamentable personaje que terminó dándome pena porque seguramente sufrió mucho toda su vida.

Roger