lunes, 24 de noviembre de 2008

El escritorio de Einstein y otros...



Pilas de papeles, sobres y fórmulas a medio escribir. Estas imágenes del escritorio de Albert Einstein en su oficina de Princeton fueron publicadas por la revista Life en 1955, pocos meses antes de su muerte. En ellas podemos contemplar una pizarra llena de ecuaciones, un montón de revistas viejas y hasta su propia pipa abandonada momentaneamente sobre uno de los cuadernos.



Sobre las ventajas e inconvenientes de tener un escritorio desordenado se han escrito auténticos tratados, algunos de los cuales sostienen que el caos puede ser más productivo que un orden demasiado estricto. Sin embargo, nada como la cita atribuida supuestamente al propio Einstein para poner las cosas en su sitio: “Si una mesa abarrotada es síntoma de una mente abarrotada, entonces ¿qué debemos pensar de un escritorio vacío?”

El cerebro en un maletero

La noche del 18 de abril de 1955 el patólogo Thomas Harvey empuñó su escalpelo y realizó una incisión en forma de Y sobre el cadáver de Albert Einstein. Con el cuerpo aún caliente encima de la mesa, el doctor extrajo el hígado y los intestinos y halló casi tres litros de sangre en la cavidad peritoneal. A continuación abrió el cráneo con una sierra circular, extrajo el cerebro y se lo llevó a su casa.

El científico japonés Kenji Sugimoto, obsesionado con la vida de Albert Einstein, emprendió a finales de los 90 una odisea personal en busca del cerebro del que tanto había oído hablar. La aventura, filmada por el director Kevin Hull para un documental de la BBC, llevó a Sugimoto a recorrer los Estados Unidos en busca de Harvey, hasta que le localizó en su casa de Kansas.Como veréis con vuestros propios ojos, la escena en la que Harvey pesca un trozo de cerebro del interior de un bote de galletas y corta una loncha sobre la encimera de la cocina no tiene desperdicio.



Provisto de su preciado trofeo, Sugimoto regresó más tarde a Japón y celebró su éxito en un club de karaoke local, donde cantó una canción acompañado del pequeño fragmento de cerebro de Albert Einstein.

El mismo que corta y pega...

Lctr.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Lecter deja el MIOLASTAN

Anónimo dijo...

Por Einstein me interesé cuando ya no era para mí algo a lo que me obligaban y ahora que aparece por aquí su cerebro "de cuerpo presente" dejo aquí un comentario suyo que aparece en una carta a Hadamard, un matemático francés preocupado por las ideas mentales que se desarrollaban en el cerebro cuando se hacían abstracciones matemáticas;un poco la psicología del pensamiento matemático

Le decía Albertito:

“Las entidades psíquicas que parecen servir como elementos al pensamiento son ciertos signos e imágenes mas o menos claras que pueden ser reproducidas y combinadas a voluntad…Pero viéndolo desde el punto de vista psicológico, este juego combinatorio parece ser esencial para el pensamiento productivo—antes de que ocurran conexiones en palabras u otro tipo de signos que pueden ser comunicados a otros. Los elementos ya mencionados son, en mi caso, del tipo visual y muscular. Las palabras convencionales u otros signos deben ser buscados de manera laboriosa en una segunda etapa, cuando el mencionado juego asociativo este suficientemente establecido y pueda ser reproducido a voluntad.

A pesar de que es una reflexión algo fuerte, así, de golpe, me parece bestial que este hombre, con ese cerebro que hemos visto como fileteaban, tuviera una percepción visual de sus ideas abstractas, con anterioridad al proceso de verbalización de las mismas. Este tipo de cosas dan que pensar, porque casi que se podría deducir que el pensamiento siempre es independiente del lenguaje, y este último, importante por su papel en la transmisión del conocimiento y en general en la comunicación, se muestra como un inconveniente en el proceso intelectual, en el pensamiento, en las reflexiones, que cuanto más profundas menos dependientes de él.

Me enrollaría más pero es un tema para el que, como dice Albertito, no tengo suficientemente establecidas las asociaciones entre las ideas y las palabras.

Ustedes perdonen la perorata.

Y ya aprovecho y OLE ESSSSPAÑA Y ESA COPA DAVISSSS!!!!

Anónimo dijo...

Joder todo eso merece una entrada, Carnlo, más que un comentario.

Y por supuesto...

ESA COPAAAAAA

Anónimo dijo...

¿Qué es una entidad psiquica...? Me suena a Iker Jiménez.

¿Pensamos en imágenes? Pues claro (bueno, los ciegos no creo). Pero el apunte ese de:"Los elementos ya mencionados son, en mi caso, del tipo visual y muscular" Perdón... ¿¿MUSCULAR??

No entiendo, lo siento. Quizás esta declaración no esté bien traducida, o simplemente yo soy muy torpe.

Cristóbal.

Anónimo dijo...

Te recomiendo, Cristóbal, la lectura del libro

"Driven interfaces in random media at finite temperature: Existence of an anomalous zero-velocity phase at small external force"

para entenderlo mejor

:)

Anónimo dijo...

Gracias. Esto me ha sido muy útil:

hG(t)˜V(F,T)t

Pero lo más ha sido descubrir que

V(F,T)˜e‑K(T)/Fμ for F→0

Cómo no habría caido antes...jeje

Cristóbal.